A propósito del año nuevo

¿Para qué prometerse algo que te va a costar hacer? Puede que sea una penitencia que nos hacemos al finalizar cada año... ¿tan mal nos portamos?.

Bien. Mi primer propósito 2007 está casi cumplido. Voy a ir al gimnasio. Apuntada estoy, hasta me compré un chándal. Ahora sólo tengo que levantarme del sofá y ... jo, cómo me gusta mi sofá. No. Voy a ir como una campeona. A machacarme. Que viene muy bien para el cuerpo y la mente. Si un día me veis y no tengo aliento, tengo la cara amoratada y estoy vestida como un zarrapastrosa no es que me haya atropellado un coche. Vengo del gimnasio. Así salgo. Y por eso pago.

Segundo. No faltar a inglés más de un día al mes. Quinto curso lo tengo perdido, pero me he gastado mucho en los libros, y las compis son una cucada. Tengo que ir para el año que viene sacar buenas notas. Y también hacer los deberes. Todos.

Tercero. Usar mi agenda para planificar, no para escribir lo que hice los últimos días. Si es que lo dejo todo para el final.

Cuarto. No engancharme a la peor cutre-telenovela que estén emitiendo. Una cada tres años como máximo.

Bueno, creo que estas son las más realizables, porque lo de encontrar un trabajo digno se lo dejo a... hoy he enviado unos 15 curris, no está mal. Y en la agenda voy a planificar que después de semana santa, otros quince.

Momento bajón, me voy al gimnasio a ver si así me distraigo y dejo de obsesionarme con el trabajo, que soy un poco pesadita. Y digo PESADITA.

Venga. Que la vida es disciplina.

1 comentario

[pily - 13 de enero de 2007 - 08:32]

Bravo por tus buenos propositos; seguro que en lugar de ir sin aliento, vas con una sonrisa de oreja a oreja y tarareando alegremente, por lo bien que te encuentras.
Cumple tu propósito y se feliz todos y cada uno de los dias de tú vida.